All Boys está frente a una oportunidad única en la Copa Argentina Sancor Seguros: se enfrentará a Boca, campeón defensor del certamen, por los Octavos de Final. Nicolás Cambiasso, arquero y capitán del equipo de Floresta, resaltó la importancia del cruce por el certamen federal, que se jugará el próximo miércoles desde las 20.30, en Catamarca.
Nota con Nicolás Cambiasso
Con 35 años, Nicolás Cambiasso quiere sacarse la espina y lograr su primer título como profesional. Si bien consiguió dos ascensos con All Boys (a la B Nacional en 2008 y a Primera en 2010), no pudo consagrarse nunca en la máxima categoría. Esa posibilidad se le presenta actualmente en la Copa Argentina Sancor Seguros, competencia en la que se ubican en Octavos de Final. Para continuar en carrera, deberán superar a Boca, campeón defensor del certamen, el próximo miércoles, desde las 20.30, en Catamarca. En una charla con el Sitio Oficial, el arquero se refirió al cruce por la competencia integradora y analizó el presente del conjunto de Floresta, además de la futura salida de José Romero, cuando finalice el semestre.
“Siempre que uno enfrenta a esos equipos, tiene una motivación extra. Son los partidos en los que cada jugador se motiva sólo, por la envergadura del rival y también por la instancia que disputamos en este certamen como la Copa Argentina”, sentenció Cambiasso, con relación al cruce ante el Xeneize. El antecedente más cercano favorece a los dirigidos por José Romero, con una victoria 2-0 (goles de Oscar Ahumada y Ángel Vildozo-de penal-) en la tercera fecha del Torneo Final. “Los dos equipos le estamos dando mucha importancia a la competencia. Sabemos que el campeón llega a la Libertadores, así que intentaremos aprovechar la oportunidad”, agregó.
Al margen de la motivación deportiva, el experimentado arquero reconoció que también hay un importante aliciente desde lo económico: “Sería muy lindo ganarle a Boca, no es algo habitual y nos llenaría de confianza. Además, está el premio ($480.000), un monto que no tuvo en cuenta el club a principios de la temporada y que puede ayudar a la economía, tanto de la institución como a la nuestra”.
En All Boys hace seis años, Cambiasso se convirtió, en 2011, en el arquero con más presencias en la institución. Como jugador e hincha, disfruta del presente del club, que lo tiene consolidado en Primera y con posibilidades de clasificar a un certamen continental. “Disfruto el momento durante la semana. Algunos compañeros pudimos presenciar cómo los hinchas viajaban por distintas canchas del Ascenso y verlo ahora, consolidado y con un respeto adquirido en la máxima categoría, nos llena de orgullo. Es una responsabilidad grande saber que hay que mantenerlo y reafirmarlo día a día”, expresó.
Aunque reconoció que “no piensa todavía en su alejamiento”, Nicolás contó sus sensaciones acerca de la partida de José Romero, quien también está en All Boys desde 2007 y se alejará al finalizar el semestre (este domingo dirigió su último partido como local, una derrota por 1-0 frente a Racing). “Lógicamente que será extraño el día que Pepe no esté más al frente del plantel. Él cree que es el momento de finalizar el ciclo, que fue el más exitoso del club, y me parece un gesto notable que muestra la clase de persona que es. Nuestra relación va a perdurar, más allá de que no compartamos el plantel. Hace seis años que nos vamos las caras todos los días, lo veo más a él que a mis familiares”, sostuvo, antes de manifestar que una victoria ante Boca sería una despedida apropiada: “Lo tomaríamos como un logro más, al margen de todo lo que conseguimos. Sería gratificante un triunfo, ya que lo consideraríamos un premio al sacrificio realizado durante el año”.
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