El DT de All Boys asumió que hubo tramos de incertidumbre pero resaltó que se superaron con actitud. “Calmamos las aguas cuando reinaba la ansiedad”, explicó Pepe. También habló sobre las claves del título.
Todavía gobierna la emoción en Floresta, el barrio que tiene a All Boys como insignia. Tras el ascenso al Torneo Nacional, el entrenador José Romero del flamante campeón se dedicó a reflexionar sobre las claves de la conquista y también le apuntó a los momentos de confusión que hubo en la campaña, en una entrevista exclusiva con tycsports.com.
“El festejo ya pasó, yo ya comencé a apuntarle al próximo torneo. Fue todo muy lindo, pero hay que diagramar mil cosas para apostar a pelear en la nueva categoría”, expresó Pepe, quien también festejó un ascenso como jugador, en 1972.
En el momento de analizar la brillante campaña, Romero se mostró decidido al marcar tres partidos claves. “El primero fue con Armenio, en la primera rueda. Empatamos pero fue vital para darnos confianza y animarnos”, empezó. “La victoria contra Morón en el arranque de la segunda ronda resultó fundamental, mientras que el éxito contra Central Córdoba nos terminó de empujar al ascenso”, concluyó.
Luego de un comienzo demoledor, All Boys cayó en una nebulosa de empates y todo hacía pensar que el equipo podía caerse. Romero se sinceró ante la crisis: “Sufrimos de ansiedad y nos costaba volver a ganar, pero era cuestión de demostrar nuestra personalidad. Pensamos que nos caíamos, no lo niego”. También contó cómo se superó la lesión de Solchaga: “Calmamos las aguas cuando reina la ansiedad y las dudas. El grupo entendió que todavía se podía y tuvo una gran actitud”.
La semana próxima, Romero arrancará las negociaciones con la dirigencia del Albo. “Mi idea es seguir, pero sueño con alguna oferta de Primera o de la B Nacional. Todavía está todo incierto”, explicó.
Link permanente: http://www.mdzol.com/mdz/nota/46322
“El festejo ya pasó, yo ya comencé a apuntarle al próximo torneo. Fue todo muy lindo, pero hay que diagramar mil cosas para apostar a pelear en la nueva categoría”, expresó Pepe, quien también festejó un ascenso como jugador, en 1972.
En el momento de analizar la brillante campaña, Romero se mostró decidido al marcar tres partidos claves. “El primero fue con Armenio, en la primera rueda. Empatamos pero fue vital para darnos confianza y animarnos”, empezó. “La victoria contra Morón en el arranque de la segunda ronda resultó fundamental, mientras que el éxito contra Central Córdoba nos terminó de empujar al ascenso”, concluyó.
Luego de un comienzo demoledor, All Boys cayó en una nebulosa de empates y todo hacía pensar que el equipo podía caerse. Romero se sinceró ante la crisis: “Sufrimos de ansiedad y nos costaba volver a ganar, pero era cuestión de demostrar nuestra personalidad. Pensamos que nos caíamos, no lo niego”. También contó cómo se superó la lesión de Solchaga: “Calmamos las aguas cuando reina la ansiedad y las dudas. El grupo entendió que todavía se podía y tuvo una gran actitud”.
La semana próxima, Romero arrancará las negociaciones con la dirigencia del Albo. “Mi idea es seguir, pero sueño con alguna oferta de Primera o de la B Nacional. Todavía está todo incierto”, explicó.
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