El drama que vivió Brian Sarmiento: “Entré en una depresión, una zona muy oscura"
El enganche decidió bajar el perfil y hoy juega en All Boys, en la Primera Nacional. El golpe que sufrió en su paso por Newell’s y la decisión radical que tomó tras volver de Grecia: “Empecé a trabajar en la carnicería de mi hermano”
Brian Sarmiento sorprendió en el último mercado de pases. El ex enganche de Estudiantes, Racing, Banfield y Newell’s volvió tras su fugaz y accidentado paso por el fútbol de Grecia y, con 29 años, fichó en All Boys, club en el que ya se había destacado en la élite, pero que en la actualidad pelea por la permanencia en la Primera Nacional, segunda categoría del fútbol argentino.
La decisión de su regreso a Floresta llamó la atención, pero se explica desde la descripción que el propio organizador de juego realizó en el programa radial Enganche que emite la FM 94.7. “La pasé muy mal en Newell’s. Entré en una depresión, en una zona muy oscura. Después me fui a Grecia y todo empeoró. Cuando llegué a Rosario sentía que ‘la tenía re larga’. Pero me pegaron en la nuca y quedé mirando los patitos por un rato”, contó. “No quería salir de mi casa, no quería que la gente me saludara. Sentí la necesidad de alejarme, yo no era ese pibe al que veían triste”, agregó.
Entonces, Sarmiento cultivaba un perfil alto, con apariciones continuas en redes sociales (patentó la frase “Tavo activo”) y hasta una participación como bailarín invitado en ShowMatch. “La gente piensa que si sos alegre o cantás una canción vivís de joda. Y yo soy muy responsable, pero no voy a vivir con cara de culo. El jugador necesita divertirse. Es mentira que la concentración dura todo el día. Llega un momento que querés salir de la rutina, sin excederse", planteó la disyuntiva que se generaba entre sus necesidades y las habladurías que afloraron alrededor de su profesionalismo.
“En el fútbol, cuando ganás sos un fenómeno y cuando perdés no sos nada. En Grecia no existía, literal. Cuando volví empecé a trabajar en la carnicería de mi hermano y a entrenar en el gimnasio de (Sebastián) Grazzini”, se refirió a su resurgimiento. En marzo del 2018, Sarmiento sufrió la fractura del tobillo izquierdo en un duelo frente a Tigre, no volvió a jugar nunca más y terminó intimando a La Lepra por falta de pago. Luego acordó su pase al Volos de Grecia, pero apenas duró tres meses (jugó sólo 8 minutos) y rescindió “por motivos personales”.
“Volví a All Boys para empezar de cero. No tengo auto, volví a viajar en colectivo. Arranqué todo de nuevo. Ahora peleo por las cosas lindas del fútbol”, concluyó.
infobae
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