BOYS GANÓ 69 a 66 EN UN PARTIDO MUY PAREJO Y CON POLEMICAS
.EN UN AMISTOSO CALIENTE, ALL BOYS LE GANÓ A QUILMES.
El equipo de Aníbal Mancini terminó su pretemporada venciendo a su par de Quilmes por 3 tantos y así logró despedirse de Mercedes de cara a la segunda parte del campeonato.
Se jugó un partido amistoso, pero... los amistosos, son amistosos? Pareciera que una vez más se confirma que los encuentros donde a priori no se juega por nada, terminan siendo más competitivos que los de un campeonato. Codazo por acá, empujoncito por allá, van haciendo subir la temperatura del termómetro y entre Quilmes y All Boys no fue muy distinto.
El encuentro comenzó con un claro dominio local encontrando, el cervecero mercedino, en Pareyra, Dinova y Perazzo una contundencia en el aro más que digna. Pero la diferencia que habían sacado los de Tessore y Midun no fue definitiva, ya que el albo logró achicarla tras la aparición de su pívot Saredo.
El segundo cuarto fue totalmente distinto y allí fue donde el visitante sacó la máxima diferencia, que después le terminó haciendo ganar el partido. La claridad de Sanfilippo, figura de la cancha, terminó sentenciando el primer tiempo y se fueron al descanso por 6 puntos.
La otra mitad, no vendría solo con básquet, dado que la floja actuación del árbitro Nicolás Lombardo, hizo estallar al banco de All Boys. El DT no comprendía los fallos del juez y lo hizo saber a voz viva, lo que ocasionó la reacción en los directivos de Quilmes, donde su mismo vicepresidente increpó al entrenador visitante diciéndole “si quieren ganar, le damos el partido ganado por 50 y listo”, pero fue allí cuando los entrenadores albirrojos pusieron paños fríos a la situación y todo comenzó a calmarse.
Verdaderamente no todo siguió igual, puesto que los ánimos estaban mas que al límite del desborde y eso se trasladó al juego. Ninguno podía jugar, eran faltas tras faltas, terminando el tercer cuarto casi con la mitad de puntos convertidos por tiros libres.
Los últimos diez minutos fueron más calmos desde los bancos, pero no tanto dentro del campo de juego. Quilmes debía salir a descontar la diferencia y eso hizo más dinámico el trámite final. Una buena defensa blanquinegra hizo mantener la brecha y llegar al final casi sin sobresaltos.
All Boys terminó ganando, todos se saludaron y los de Quilmes prometieron visitar al albo para jugar.... ¿un amistoso?.
NOTA ENVIADA POR ARIEL CORIA SEC DE PRENSA
.EN UN AMISTOSO CALIENTE, ALL BOYS LE GANÓ A QUILMES.
El equipo de Aníbal Mancini terminó su pretemporada venciendo a su par de Quilmes por 3 tantos y así logró despedirse de Mercedes de cara a la segunda parte del campeonato.
Se jugó un partido amistoso, pero... los amistosos, son amistosos? Pareciera que una vez más se confirma que los encuentros donde a priori no se juega por nada, terminan siendo más competitivos que los de un campeonato. Codazo por acá, empujoncito por allá, van haciendo subir la temperatura del termómetro y entre Quilmes y All Boys no fue muy distinto.
El encuentro comenzó con un claro dominio local encontrando, el cervecero mercedino, en Pareyra, Dinova y Perazzo una contundencia en el aro más que digna. Pero la diferencia que habían sacado los de Tessore y Midun no fue definitiva, ya que el albo logró achicarla tras la aparición de su pívot Saredo.
El segundo cuarto fue totalmente distinto y allí fue donde el visitante sacó la máxima diferencia, que después le terminó haciendo ganar el partido. La claridad de Sanfilippo, figura de la cancha, terminó sentenciando el primer tiempo y se fueron al descanso por 6 puntos.
La otra mitad, no vendría solo con básquet, dado que la floja actuación del árbitro Nicolás Lombardo, hizo estallar al banco de All Boys. El DT no comprendía los fallos del juez y lo hizo saber a voz viva, lo que ocasionó la reacción en los directivos de Quilmes, donde su mismo vicepresidente increpó al entrenador visitante diciéndole “si quieren ganar, le damos el partido ganado por 50 y listo”, pero fue allí cuando los entrenadores albirrojos pusieron paños fríos a la situación y todo comenzó a calmarse.
Verdaderamente no todo siguió igual, puesto que los ánimos estaban mas que al límite del desborde y eso se trasladó al juego. Ninguno podía jugar, eran faltas tras faltas, terminando el tercer cuarto casi con la mitad de puntos convertidos por tiros libres.
Los últimos diez minutos fueron más calmos desde los bancos, pero no tanto dentro del campo de juego. Quilmes debía salir a descontar la diferencia y eso hizo más dinámico el trámite final. Una buena defensa blanquinegra hizo mantener la brecha y llegar al final casi sin sobresaltos.
All Boys terminó ganando, todos se saludaron y los de Quilmes prometieron visitar al albo para jugar.... ¿un amistoso?.
NOTA ENVIADA POR ARIEL CORIA SEC DE PRENSA
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